Introducción. Es evidente que la resistencia al esfuerzo cortante de un suelo depende principalmente de la presión de poro existente en el momento de la falla. Las presiones de poro pueden deberse a los esfuerzos a que se sujeta el suelo o a los cambios volumétricos que tienen lugar durante los procesos de corte. Por otra parte, el exceso de presión en los poros tiende a disiparse con la expulsión del agua. La rapidez a la que puede disiparse, y por lo tanto, la resistencia al corte que puede desarrollarse en el campo, depende en gran parte de la permeabilidad y de las dimensiones de la masa de suelo in fluida por los esfuerzos cortantes. Dependen también de la rapidez con la que se aplican los esfuerzos; un cambio muy lento en el esfuerzo aplicado a una masa de suelo de baja permeabilidad puede no producir presiones en los poros mayores que un esfuerzo rápidamente aplicado en un suelo muy permeable. Estas consideraciones constituyen una base para estimar la resistencia al corte en los problemas prácticos, o para elegir procedimientos de prueba apropiados a dichos problemas.
domingo, 13 de febrero de 2011
Selección de Procedimientos de Prueba para Determinar la Resistencia al Corte de los Suelos en la Práctica.
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